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Radiaciones solares ultravioleta, el peligro silencioso

En un entorno donde estamos cada vez más expuestos a las radiaciones solares ultravioleta, parece que esta amenaza pasa desapercibida para la gran mayoría de gente, y esto muy probablemente se deba a la falta de información.

Los datos

Según los datos de Visión y vida, un 63% de adultos no utiliza gafas de sol en días nublados, y el 65% de usuarios las considera como un accesorio puramente estético. De hecho, sólo un 12% de las gafas de sol vendidas se comercian en centros especializados en salud visual, lo que hace pensar que la gente no percibe la exposición al sol como un peligro para sus ojos, ya que normalmente creen que no necesitan la ayuda de un profesional a la hora de comprar este tipo de productos.

Las gafas de sol se han instaurado como un complemento más, pero ya hace muchos años que varios expertos en la materia alertan de la necesidad de protegernos de este peligro silencioso que nos puede dejar secuelas. 1 de cada 7 adultos aún encuentra inexistente la relación entre la exposición a la radiación ultravioleta y las graves enfermedades oculares, pero si se tuviera más conocimiento de los datos, es muy probable que mucha gente cambiaría de parecer: 3 millones de personas quedan ciegas cada año debido a la sobreexposición a los rayos ultravioletas del sol.

Colectivos sensibles

En el caso de los colectivos más vulnerables como son los niños y las personas mayores, la exposición a la radiación solar puede ser aún más perjudicial: los niños reciben 3 veces más radiación que los adultos, y los ancianos no sólo deben cuidar su piel sino que en el ámbito ocular deben prevenir al máximo enfermedades como la DMAE o las cataratas.

En todo caso, parece que todavía hay un desconocimiento general sobre el mundo de la salud visual. Informando correctamente de las consecuencias de la sobreexposición al sol, la sociedad podría evitar sufrir muchas enfermedades oculares y de la piel. Se trata de un peligro silencioso, pero que se puede prevenir escuchando a los profesionales.

Fuente: Visión y vida.

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